09 abril 2011

Cobardes... vergonzoso!!!

La tercera división de Juventud Antoniana jugó esta tarde en la cancha de Comercio ante el local, iba ganado una a cero y cuando faltaban pocos minutos para el final un escándalo provocado por jugadores, padres y vecinos de Comercio no permitió que el partido termine y varios jugadores antonianos recibieron golpes, de hecho uno de ellos fue trasladado de urgencia al nuevo Hospital del Milagro. 

Todo comenzó cuando dos jugadores, uno por cada equipo se empujaron y parecía que no pasaba a mayores, pero un jugador de Comercio golpeo desde atrás al jugador antoniano y esto provoco una batalla campal en donde padres y personas ajenas al partido agredieron cobardemente a los chicos de la tercera división de Juventud Antoniana.
El capitán antoniana “Fofito” Rodríguez fue uno de los más afectados y fue trasladado por un auto particular al nuevo Hospital del Milagro ya que la ambulancia nunca asistio al lugar a pesar de los constantes llamados de la policía.
Cuando comenzó el partido y durante los acontecimiento había en el lugar 4 policías, a pesar de que los padres de los jugadores de Juventud le pidieron mayor seguridad, viendo el entorno y que los insultos que recibían desde afuera eran cada vez más constantes, no llamaron a más policías y recién actuaron cuando comenzaron las agresiones.
Entre padres, vecinos y jugadores locales eran cerca de 50 personas que agredieron a los jugadores antonianos. Estas agresiones podrían haber pasado a mayores, provocado una tragedia y solo gracias a Dios no fue más grave. La liga salteña, quien esta analizando los sucedido con fotos, testimonios y a la espera del informe del arbitro, debe tomar cartas en el asunto y realizar una inspección en todas las canchas, analizando las medidas de seguridad, el entorno en donde se juegan los partidos y se exponen chicos que encuentran en el fútbol un espacio para el crecimiento deportivo y personal.
Lamentablemente no tenemos más material fotográfico ni filmaciones ya que por la inseguridad que sentimos guardamos las maquinas.