
Para no perder la costumbre el Santo volvió a demostrar quién manda en Salta. En el clásico disputado en el Honorato Pistoia Juventud se quedo con una gran victoria a pesar de no haber jugado como nos tiene acostumbrados los pibes de Cuadrado.
En la solvencia de Quinteros, la garra de Hermosilla, la velocidad de Romero y principalmente en la gran actuación del arquero Zarate estuvieron las claves del triunfo antoniano. Seba Quinteros estuvo muy firme en la marca y solo salió de la cancha por un golpe, “Panchito” Hermosilla fue un baluarte del mediocampo y nunca dejo de correr a los rivales, Romero fue quien más complico a la defensa cuerva y de una gran jugada suya llegó el gol antoniano. Pero la actuación más destacada fue la de Luciano Zarate con grandes atajadas y mostrando todas sus condiciones en el partido más importante que le toco disputar en su corta carrera en el anual.
